Incluir un capítulo sobre energía en el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y crear normas en torno al cuidado del medio ambiente, son algunas de las propuestas que el Instituto George W. Bush planteó para crear un comercio integral en el Tratado de Libre Comercio (TLC).
A través de un aviso de intención para someter un arbitraje bajo el Capítulo 11 del TLCAN, el Instituto George W. Bush, busca influir para que se tome en cuenta la industria energética en el mencionado TLC. El Instituto se basa en que al existir reformas en materia de energía en México “cambia el juego”, por lo tanto es sumamente necesario y sustancial para toda Norteamérica tener en cuenta dichos cambios dentro del TLC para asegurar el aprovechamiento de las recientes reformas y de esta manera posicionar a la región.
“La ampliación del pacto para incluir la cooperación energética no sólo genera nuevas oportunidades de mercado para los bienes y servicios estadounidenses, sino también permitirá a Norteamérica posicionarse como una superpotencia abundante en energía” señaló el documento presentado ante el Tribunal Federal del Distrito de Texas, en el cual se vierte la solicitud y las propuestas del Instituto.
Un elemento prioritario que requiere ser atendido es la eliminación del proceso del permiso presidencial de los Estados Unidos para la infraestructura transfronteriza en la materia, esto para acomodar un volumen creciente, al mismo tiempo que se gestionen riesgos en el ámbito de la seguridad. El resto de las propuestas sugeridas son:
- Incluir un capítulo detallado sobre energía en el TLCAN.
- Establecer acuerdos sobre cooperación energética entre México, EU y Canadá.
- Crear normas convergentes de seguridad y medio ambiente.
- Ampliar la infraestructura fronteriza.
La solicitud hasta el momento no ha sido resuelta. Las próximas reuniones para la renegociación del TLCAN empiezan en agosto y distintos funcionarios como Wilbur Ross, Secretario de Comercio de EU ha señalado que la modernización del acuerdo tal vez se postergue hasta el 2018; por lo tanto, este tema posiblemente quedará pendiente durante el transcurso de los siguientes meses, no menos importante por ello. Además, hay que considerar la actitud del mandatario Donald Trump frente al tratado, quien ha enfatizado en diversas ocasiones que aceptará las actualizaciones siempre y cuando sea justo para todos, y en otras palabras, sólo a su conveniencia.
Así que no queda más que esperar y por el momento, aplaudir que alcen la mano para generar estas propuestas que buscan la unión y engrandecer los acuerdos comerciales en lugar de sólo colocar limitantes.