En este mismo mes se estarán presentando sendas iniciativas sobre la plata, tanto en la Cámara de Diputados como en el Senado de la República, con el apoyo técnico del Colegio de Economistas, instituciones académicas y algunos de los Gobiernos de los Estados Mineros, cuyos propósitos son los siguientes:
1.- Impulsar el ahorro nacional en plata.
Desde luego no se propone un “patrón plata” sustituto del peso ni alteración alguna respecto al peso actual. La moneda de plata libertad que está en curso legal desde 1979 sería una moneda complementaria. Banco de México observaría la facultad de determinar el ritmo y cantidad de monedas a acuñar. Los objetivos estratégicos son ofrecer a la población una alternativa de ahorro de alta calidad. Estaría inmune a pérdidas por devaluación o por inflación, especialmente útil para el amplio sector social no bancarizado.
Somos el primer productor de plata y actualmente se exporta 95%. Nuestra plata debe quedarse en México como ahorro en beneficio permanente de los mexicanos.
2.- Actualmente, con motivo de la revisión del TLCAN con Estados Unidos y Canadá, tiene nuestro país un invaluable valor para sentar mejores bases en su sistema monetario que fortalezcan el desarrollo nacional, máxime si se toma en cuenta la inestabilidad que actualmente presenta el peso mexicano por la política económica y comercial anunciada por el señor Trump, circunstancia que puede ser neutralizada fortaleciendo la emisión de moneda plata mexicana.
3.- Aunado a lo anterior, la ventaja comparativa que nuestro país tiene en la producción de plata le confiere un potencial de desarrollo que hay que aprovechar, entre ellas inmunizar nuestro sistema monetario y financiero de los vaivenes del comercio exterior; establecer el centro de gravedad de la nación dentro del propio territorio, esto es impulsar el mercado interno, estimular el ahorro ya que la plata no se devalúa sino por el contrario está en constante sobrevaluación; restablecer el orgullo nacional, nuestra autoestima que está muy baja actualmente debido a décadas de devaluaciones, crisis y creciente corrupción e impunidad; la monetización de la plata favorecería la bancarización de los sectores populares; favorecería la creación de un nuevo mercado al permitir que la mayoría de la plata se quede en nuestro país; por último, entre otras muchas cosas más, incentivaría la industria minera.
