Viviana Salgado Molina, Directora de Disciplinas de Comercio Internacional de la Secretaria de Economía y Sofía Pacheco, Analista de Comercio Internacional, abordaron información sobre la Organización Mundial de Comercio (OMC) que es el organismo regulador del comercio internacional más reconocido, la cual desde su creación, se ha enfocado en liberar el comercio internacionanl de forma progresiva, siendo una entidad que busca que se facilite la negociación de los acuerdos comerciales entre las naciones y, para tal efecto ha ideado la creación de normas comerciales para que todos sus Estado Parte los sigan y, en los casos de problemas que se puedan considerar técnicos, han creado mecanismos para ayudar a las naciones a resolver los problemas que surjan de ello.
Sobre los Acuerdos sobre Obstáculos Técnicos al Comercio (OTC) de la OMC la Lic. Viviana Salgado Molina, Directora de Disciplinas de Comercio Internacional de la Secretaria de Economía reconoce de entrada que el objetivo de estos acuerdos es evaluar los reglamentos técnicos, a las normas y a los procedimientos de evaluación de cada Estado Parte para verificar que esos elementos no sean obstáculos para el comercio internacional, de encontrar algunas disposiciones como obstáculos, se procede a analizarlos y proponer medidas para que, finalmente, se logren los objetivos que permitan un mejor comercio internacional que además vayan alineados a las políticas públicas de cada nación, siempre apoyándose en principios esenciales que no discriminen a las naciones ni sus empresas, que tengan peso proporcional para todos, además que sean transparentes y sean apoyados en la norma internacional, de la que ya sabemos, busca que el comercio internacional pueda ser mejor para todos los países, de ahí la necesidad de que los países se apoyen en los estándares universales para, así, apoyar mejores relaciones comerciales entre los involucrados.
Lo interesante de los compromisos sobre los obstáculos técnicos, que son incluidos en prácticamente cada tratado comercial con los que México ha firmado, es que, son fundamentalmente para facilitar el comercio internacional, apoyándose de reglas claras y transparentes que permitan en su proceso, promover una cooperación de cada Parte, con la creación de buenas prácticas comerciales y regulatorias, dichos fundamentos se han llevado a los tratados, en el TLCAN existieron y ayudaron a tener mejor intercambio comercial, que se dio con la existencia del Comité de Medidas Relativas a la Normalización misma que, en su momento han ayudado a crear normas en los campos de transporte, telecomunicaciones, en el industria del vestido y en la rama automotríz que permitieron un trabajo activo para las tres naciones en dichas áreas industriales.
En el TIPAT se tienen también las disposiciones en los tratados internacionales que incorporó el Acuerdo de Obstáculos Técnicos al Comercio (OTC) trayendo ls fundamentos de no discriminación, transparencia, que se llevó incluso a lo que se conoce como TLCAN Plus, que permite una mejos comunicación con las entidades, para la notificación, la consulta pública y las medidas para adoptar la transparencia y también busca que se reconozca la decisión del Comité OTC como una referencia para el comercio en el futuro.
En el caso del T-MEC, también buscó que se incorponer el Acuerdo OTC a este tratado, con las aristas del TLCAN Plus remarcando la importancia de la transparencia de la que se habló previamente y también del Costo Evaluación de la Conformidad que lleva a conocer el costo del servicio, las que, junto con el uso de las normas internacionales, la subcontratación y acreditación, todos en conjunto tienen como fin mejorar el funcionamiento del T-MEC.
Sobre el análisis de los compromisos dentro del TIPAT y del T-MEC, Sofía Pacheco Niño de Rivera, Analista de Comercio Internacional explica que se ha apoyado el trabajo con las normas internacionales, apoyándose de lo que dispone la OMC para crear normas, guías y reconocimientos internacionales, evitando, además, la aplicación de principios adicionales que ensucien o compliquen el libre comercio.
En el tema de las disposiciones en los Tratados Internacionales, se tuvo a la Evaluación de la Conformidad, que dispone reglas para que se dé el trato nacional a las empresas internacionales, demostrar que todo se apega a la normalidad y que no hubo mano negra al rechazar empresas de otros países, con evaluaciones al costo de servicio incluyendo, según el caso, de fomento a los acuerdos de reconocimiento mutuo y de evaluaciones de riesgo para elegir los mejores procedimientos de la evaluación
Incluso, la Lic. Pacheco habló de los Organismos de Evaluación de la Conformidad (OEC), se sugiere, si es posible, que sean autoridades gubernamentales locales, quienes se supone disponen de la información detallada de las empresas de cada una de sus regiones de influencia, cuyos resultados siempre sean apegados a la transparencia.
Se habló nuevamente del ePing como un servicio que permite saber sobre casos de normas en el comercio internacional de la OMC para poder entrelazar a las entidades sobre alguna notificación de regulaciones que se implementarán en el futuro, reduciendo así los problemas arancelarios por no cubrir las disposiciones de la norma de exportación o importación, para que, así, desde las primeras etapas del comercio se conozcan todos los candados y regulaciones y se pueda disponer de lo necesario para cumplirlas en tiempo y forma, reduciendo los problemas y maximizando el comercio internacional, apoyado por la OMC, con ese conocimiento previo.
Incluso se llegó a indagar información sobre los Anexos Sectoriales TIPAT-T-MEC donde el Lic. José Rivelino Flores de la Cámara Nacional del a Industria Farmacéutica (CANIFARMA) y el Lic. David Tomás Ureña, de la Cámara Nacional de la Industria de Productos Cosméticos (CANIPEC), quienes trataron el tema.
Se habló en el TIPAT, desde sus inicios se apreció que los obstáculos técnicos al Comercio servían de forma general, pero que podía adaptarse a áreas específicas, al promover las buenas prácticas para cada sector, de tal forma que se crearon sectores específicos apoyados del objetivo de eliminar los obstáculos al comercio en dichos sectores, apoyados en buenas prácticas que permitan un trabajo más ambicioso. Los sectores que se adaptaron específicamente fueron Vinos y Bebidas espirituosas, Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC), Cosméticos, Farmacéuticos, Dispositivos Médicos, Fórmulas para la comida preenvasada y aditivos alimentarios y Productos orgnánicos en el TIPAT y; en el T-MEC fueron los sectores de Bebidas espirituosas, vinos, cerveza y otras bebidas alcohólicas, TIC, Cosméticos, Farmacéuticos, Dispositivos Médicos, Fórmulas para comida pre-envasada y aditivos alimentarios, Normas de Eficiencia energética y Sustancias y Mezclas químicas. Para saber sobre cada uno de estás áreas de comercio, es necesario analizar los anexos sectoriales detalladamente.
Por otro lado, en el TIPAT se tuvo un anexo único para productos orgánicos, que deben apegarse a objetivos legítimos, pensando siempre en el beneficio del comercio internacional y con apoyo en información técnica para que se tengan normas regulatorias justas para todos.
El Lic. Ureña habló de la CANIPEC de entrada, que engloba a 68 empresas de la industria del cuidado personal y cosméticos y del hogar, creando más de 160 mil empleos directos e indirectos, siendo una industria importante en el mundo, representando el 2.14% del PIB en el mundo y es una industria importante para México, esta CANIPEC reconoce la importancia de los anexos sectoriales que permiten realizar mejores prácticas comerciales para el mundo, teniendo oportunidades para lograrun mejor comercio, diversificando los mercados.
En el caso de los productos cosméticos deben ser inocuos para el ser humano, de ahí la importancia de la correcta regulación, con una vigilancia para proteger al consumidor y sus necesidades, además que también consideró importante la eliminación de requisitos que afecten el comercio, la eliminación del mercado de libre venta, la eliminación de autorización comercial o sustitución por una notificación simplificada, entre otras.
Se destacó la eliminación del certificado de libre venta, que servía para conocer si cumplia con las disposiciones del país de origen, pero lo importante es la reglamentación en el país destino, que debe cumplirse cavalmente, siendo así que el primero no era tan importante para el país destino.
Le Lic. Ureña habla de diferencias en las certificaciones del TIPAT y del T-MEC, en el caso de los productos cosméticos, la segunda reconoce la importancia de la norma internacional, por ejemplo de la OMC, para así tener una norma internacional mayormente reconocida por los países.
En el caso del Lic. Rivelino, representante de la CANIFARMA, quien habló de los anexos técnicos de los productos farmacéuticos, con 170 empresas farmacéuticas, incluyendo el mercado genérico y de moléculas nuevas, quien reconoce que la industria farmacéutica es altmanete regulada, por sus fines en el riesgo sanitario a las poblaciones humanas, que se apegan en normas internacionales emanadas, por ejemplo de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y en México, se deben apegar a las normas de la Secretaría de Salud.
La intención en los tratados es evitar los obstáculos al sector, donde, en el T-MEC y el TIPAT se crearon los anexos sectoriales específicos para el sector farmacéutico, donde se establece una armonización en las regulaciones para que el comercio permita reducir el riesgo en estos productos farmacéuticos, así, con la normalización se podrán llevar los productos farmacéuticos a cualquier país del T-MEC y del TIPAT. Esto es lo fundamental de la normalización.
Se recuerda que, los gobiernos tienen la obligación para garantizar la calidad de los productos de acuerdo a la norma, de ahí la creación de visitas de inspección para conocer si se cumplen con las normativas en las empresas, la idea tener buenas prácticas que permitan reconocer que todo funciona correctamente.
Por ejemplo, es importante que se tenga un intercambio en las actas de inspección, con lo que se aceleraría el proceso de reconocimiento de las buenas prácticas de conformidad y de certificaciones hechas a aquellas empresas que cumplen con las normas y que permitan conocer la seguridad en el funcionamiento de las empresas y de la creación de sus productos.
Así, la necesidad del intercambio comercial debe apoyarse en la protección de los países, permitiendo en el proceso las buenas prácticas comerciales con una reducción de aranceles en todos los sectores, y en los casos de los anexos sectoriales, para facilitar el libre comercio en T-MEC y TIPAT, maximizando el comercio internacional.
